Utah Jazz vence en el retorno a casa
Utah Jazz 93 - 89 Toronto Raptors
Toronto (7-6) visitaba anoche Salt Lake City tras caer derrotado en la bahía de San Francisco en un final polémico contra los actuales campeones de la NBA, Golden State Warriors. En un encuentro igualado prácticamente en todo momento los Jazz (6-5) se terminaron imponiendo tras un último cuarto sobresaliente en el que anotaron 34 puntos. Para Utah es un gran signo ya que se trata del segundo partido consecutivo que consiguen cerrar en la recta final, tras haber sufrido para hacerlo a principio de campaña. Los Raptors desaprovecharon el buen partido de sus interiores con un pobre porcentaje exterior, 5 de 20, que los lastró en contraste con los 40 tantos que encestaron en la pintura.
Tras haber perdido de manera abultada los anteriores cuatro enfrentamientos con Toronto, el conjunto entrenado por Quin Snyder consiguió sobreponerse a pesar de estar por debajo en el marcador a falta de 4:16 para terminar tras un espectacular mate de la estrella de los canadienses, DeMar DeRozan, sobre el pívot francés Rudy Gobert. Parecía que esa jugada podía terminar de desequilibrar la balanza en favor de los visitantes:
«Cuando algo así pasa, como que te hiere el orgullo un poco, así que tratas de defender un poco mejor – dijo Derrick Favors -. Lo siento por él porque a mí también me han machacado en la cara unas cuantas veces».
El interior de los Jazz reiría el último cuando a falta de 59 segundos y con Utah 86-85 por encima en el luminoso – dentro de un parcial de 11-2 -, rozó el tapón sobre el mismo DeRozan en una jugada clave, consiguiendo sin embargo el air ball del de los Raptors. Gobert se tomaba la venganza que andaba buscando:
«Sí, claro, trato de volver la siguiente vez. No es el primero. No es el último. Todavía voy a volver la siguiente vez».
Un 2+1 posterior de Favors terminó por cerrar el encuentro para Utah, que aprovechó una gran segunda mitad de Alec Burks – máximo anotador del equipo con 16,2 de promedio – también, ya que el escolta anotó el total de sus 13 puntos entre los últimos instantes del tercer cuarto y el último período. El intento desesperado de Kyle Lowry para empatar el partido a falta de cuatro segundos no tuvo éxito.
«(Dwayne Casey, entrenador de Toronto sobre el parcial de 34-25 en el cuarto cuarto) Nuestra concentración defensiva en el último cuarto al conceder 34 puntos… Ahí estuvo el partido. Nos estamos disparando en el pie con pobres jugadas defensivas y pobres jugadas ofensivas. Hasta que lo aprendamos va a ser lo mismo de siempre».
Toronto cosechó su tercera derrota seguida en la gira por la Conferencia Oeste que están realizando, aunque se mantienen en positivo. El ala-pívot Luis Scola lideró a los suyos con 18 puntos en la primera mitad, pero tan solo pudo sumar cuatro más en la reanudación. DeRozan le suplió sin embargo, contribuyendo con 12 de sus 14 tantos en el último cuarto tras la exhibición realizada en Oakland la noche anterior. También lamentó el entrenador Casey el lento inicio de su escuadra (19-24 en el período inicial), algo que ya viene siendo habitual y es motivo de preocupación en los Raptors:
«Todo lo que podemos hacer es resolverlo. Si no conseguimos un mejor inicio, la otra única opción es cambiar la alineación. No sé si estamos en ese punto todavía. Créeme, tengo cada número conocido por el hombre acerca de nuestras dificultades en el primer cuarto. Lo sabemos. Trabajamos para intentar corregirlo. Es todavía nuestro talón de Aquiles».
Los Jazz dominaron la batalla en los tableros a pesar de tener un partido inferior a sus estándares en la pintura, recibiendo más puntos de los que normalmente conceden en el área restringida y eso a pesar de la presencia de Gobert. Favors sumó un doble-doble con 17 puntos y 11 rebotes en 7 de 9 en tiros de campo, y el sophomore Rodney Hood añadió 16 y 6 en 5 de 10. Utah estuvo también más acertado con el tiro exterior y tuvo mayor aportación de su banca, superando 29 a 15 a los del Canadá.
Utah viaja a Dallas para enfrentarse a los Mavericks el viernes, mientras que Toronto vuelve a la costa del Pacífico para medirse a los Lakers el mismo día.