Arron Afflalo dinamita a los Atlanta Hawks

Atlanta Hawks 97 - 111 New York Knicks

Fuente: Jean-Baptiste Bellet (CC)
Fuente: Jean-Baptiste Bellet (CC)

Los New York Knicks tuvieron un inicio soñado en el partido. Rápidamente hicieron buenas defensas y buenos ataques consecutivamente para irse por 2-11 en el marcador, demandando el tiempo muerto de Mike Budenholzer. La reacción tras el tiempo muerto no se hizo de esperar, y los Hawks con un buen parcial volvían al marcador con el 9-11. Tras un bonito intercambio de canastas, era Derek Fisher quién paraba el partido. Curioso el encuentro, con hasta cuatro jugadores ex ACB (Porzingis, Calderón, Vujacic y Tavares), además de uno que causaba baja (Splitter). Con un triple de Bazemore, los Hawks se ponían por primera vez por delante a falta de 3:14 en el 1Q. Sin embargo los Knicks seguían provocando muchas pérdidas a los de Georgia y con un Afflalo ya muy acertado los Knicks empezaban a carburar mejor; gracias también a la aportación de hombres clave como Robin Lopez o Galloway. Con las segundas unidades en pista, los Hawks volvieron a igualar y al final del 1Q el marcador era 21-22 para NYK.

Los locales salieron mucho más enchufados al 2Q y rápidamente con parte de la segunda unidad en pista, se fueron 8 arriba en el marcador. Jeff Teague tomaba las riendas para los Hawks mientras que el joven Grant se combinaba con Porzingis para una gran aportación ofensiva. La ventaja llega a los dobles dígitos minutos más tarde. Lo cierto es que los Hawks seguían sufriendo bajo el chaparrón y la ventaja de los locales seguía aumentando, hasta que el mejorado Kent Bazemore en esta temporada replicaba con un triple, saliendo al paso ante la racha knickerbocker. A los Hawks les costaba mucho anotar y estaban encontrando una ligera continuidad gracias a los tiros libres, forzando muchas faltas. Al descanso los New York Knicks se irían por delante por 10 puntos (45-55) tras un buen fin de cuarto de los Hawks, mejor en defensa y acertados en las transiciones. 

El inicio de la segunda parte no podía ser mejor para los locales. Arron Afflalo seguía tirando del carro con sus triples, aunque de nuevo Kent Bazemore era quién cortaba esa buena racha con otro triple, su cuarto particular. Carmelo Anthony seguía sin tener una noche arrolladora en anotación, pero aportando con asistencias y más juego colectivo. Los Hawks poco a poco se acercaban en el marcador y con una canasta de Horford se ponían a 7 puntos, pero los locales no dejaban que la ventaja disminuyera más. Llegábamos al ecuador del 3Q y Arron Afflalo seguía dinamitando el partido, ya con 28 puntos. Kyle Korver intentaba desde el triple recortar distancias, pero sus lanzamientos eran una de cal y una de arena, mientras los Knicks seguían apretando el pistón. Volvieron después las segundas unidades y los Hawks consiguieron recortar hasta los 8 puntos de ventaja para los locales. Tras una canasta final de Robin Lopez nos íbamos al final del 3Q 76-86. 

El partido seguía y en el MSG los ojos iban para un sólo hombre: Arron Afflalo. El escolta de los Knicks seguía con un acierto tremendo, pero lo más importante fue el hecho de que encima estuviera sirviendo para aumentar aún más la ventaja con los de Georgia, que se mostraban mucho peores que los dos partidos anteriores ante los Knicks esta temporada. A Afflalo se le sumaba por momentos el acierto de Galloway mientras que a los Hawks ya no les entraban los triples salvadores de Bazemore, por lo que la ventaja seguía aumentando. A falta de 7:22 los Knicks mandaban por 16. El partido seguía transcurriendo y los Hawks pese a estar muy parejos en juego con los Knicks, no conseguían meter una marcha más que les permitiera remontar el partido. A falta de 2:54 y con los Knicks 16 arriba, se izó la bandera blanca y ambos equipos sacaron del partido a los titulares. El marcador final fue de 97-111 para los Knicks.

Millsap y Bazemore con 19 y 18 puntos respectivamente lideraron la ofensiva visitante, en un partido algo discreto de Al Horford y con Korver y Teague muy poco acertados en el tiro. Además los Hawks estuvieron superados en casi todos los apartados estadísticos por unos Knicks mucho más presentes en el partido como bloque, algo muy extraño ante un equipo como los Hawks.

El mejor del partido fue Arron Afflalo con esos 38 puntos con 7 triples en 8 intentos. Lopez hizo un gran partido con 16 puntos, 11 rebotes y 3 tapones. Melo y Porzingis pasaron a un segundo plano y Jerian Grant fue una de las sorpresas desde el banco, anotando 8 puntos junto con 3 rebotes y 7 asistencias.