Los Rockets se apoyan en James Harden para superar a los Jazz

Utah Jazz y Houston Rockets se enfrentaban anoche en Texas con muchas bajas de jugadores importantes en sus filas, principalmente en  la zona. En los mormones todavía seguía de baja Derrick Favors, mientras que Rudy Gobert volvía de una lesión de la rodilla y salía desde el banquillo. En los locales Dwight Howard se perdía el encuentro también junto a Donatas Motiejunas. Además, Ty Lawson tampoco podía disputar el encuentro aunque en su caso el motivo era una suspensión de 3 encuentros que empezaba ayer por problemas con la justicia. Ante tanta baja, Gordon Hayward y James Harden se antojaban más importantes que nunca en sus equipos.

Los hombres de Bickerstaff parecían empezar el partido más entonados, anotando sus 5 primeros lanzamientos y marchándose con un parcial de 2-10, pero los Jazz reaccionaron y mediado el cuarto ya habían igualado el partido. No fue Hayward sino Hood – que lleva ya unos partidos a muy buen nivel también en ataque – el que tomó la iniciativa para los de Salt Lake City, y gracias a ello llegaron a tener un +7 y finalizaron el primer partido arriba 25-22.

En el segundo el partido siguió por los mismos lares, con los visitantes siempre por delante en el marcador pero sin llegar a conseguir una ventaja destacable, principalmente gracias a James Harden, que empezaba poco a poco a enchufarse en ataque. A 3 minutos y medio para el descanso los Jazz volvían a poner el +7 en el luminoso, la máxima diferencia en su favor del partido y para el final de la primera mitad, tenían 5 puntos de distancia, 44-39.

La defensa de los Rockets hizo acto de presencia por primera vez tras la vuelta de vestuarios, y desde ahí fueron consiguiendo alguna canasta fácil y stops que les dieron moral para ponerse de nuevo por delante mediado el cuarto. A 2 minutos para terminar el cuarto, los que ahora conseguían 7 puntos de ventaja eran los locales, que terminaban llevándose este tercer parcial por 22-33, y el marcador mostraba un 66-72 también favorable a sus intereses.

Sin embargo, los primeros 36 minutos habían demostrado que ninguna ventaja era segura, y los Rockets deberían seguir peleando otros 12 minutos para que la victoria se quedara en casa y no se marchara hacía Salt Lake City.  Como durante el resto del partido, tanto en marcador como en sensaciones este último período estuvo muy igualado, aunque esta vez quienes llevaban la iniciativa eran los de Houston, con ventajas que rondaban los 5 puntos. James Harden era, evidentemente, el go to guy de los Rockets con sus características penetraciones con contacto y tiros bien defendidos, pero que entraban y mantenían por delante a su equipo. En los Jazz las responsabilidades las tenía principalmente Hayward, aunque Trevor Booker también estuvo muy bien en los minutos finales. 4 puntos separaban ambos conjuntos a falta de 35 segundos. Harden fallaba sorprendentemente uno de sus tiros libres, pero Hayward se jugó un incomprensible triple muy forzado que no tocó ni aro y con los tiros desde la personal de Terrence Jones se esfumaron las oportunidades de los Jazz de llevarse el partido. Al final, el marcador fue de 94-103.