Los Wolves rompen la mala racha a costa de unos Suns sin rumbo
Phoenix Suns 87 - 117 Minnesota Timberwolves
Phoenix Suns visitaba a Minnesota Timberwolves en el Target Center, en un encuentro entre dos equipos del Oeste que no atraviesan su mejor momento deportivo precisamente. 13-28 y 12-29 eran los balances respectivamente antes del partido, situándose en los puestos 13 y 14 de la Conferencia y ambos con un balance de 1-9 en los 10 últimos encuentros. Por tanto, este podía ser un partido balsámico para quien fuera que consiguiera la victoria, y la puntilla que terminara de hundir al que encajara otra derrota más. Las bajas de los Suns eran la ya conocido out for season de Eric Bledsoe, y también la de Alex Len; mientras que en los Wolves Kevin Martin podía volver a vestirse de corto tras perderse el último partido contra OKC por enfermedad.
En el primer cuarto la igualdad fue la tónica dominante, con Andrew Wiggins en modo apisonadora (anotando 12 puntos en este primer período, consiguiendo los rebotes de sus pocos fallos y asistiendo a sus compañeros), pero los Suns respondían a cada uno de los ataques del sophomore y se mantenían muy cerca en el marcador. Tan bien respondían que a 20 segundos para el final del cuarto Brandon Knight anotó un triple que puso a los Suns por delante, aunque los locales consiguieron anotar en la última posesión y terminaron el cuarto por delante, 23-24.
Poco cambió en el segundo cuarto con la entrada de las segundas unidades. El buen hacer en ataque de los suplentes locales (LaVine, Martin, Pekovic…) se veía compensado por las lagunas defensivas que generaban, y que los Suns iban aprovechando para no desengancharse demasiado en el luminoso principalmente gracias a Knight. Sin embargo, los de Sam Mitchell lograron marcharse poco a poco, minuto a minuto, y para la media parte el resultado mostraba una diferencia de 10 puntos, 48-58.
En la salida de vestuarios los Suns estuvieron algo desconectados, hecho que aprovecharon los locales para establecer la máxima ventaja hasta el momento, 14 puntos. En esas diferencias alrededor de la decena transcurrió el resto del cuarto, con un Ricky Rubio bastante enchufado en el tiro y unos Suns que subsistían con jugadas aisladas de Knight, Morris o algún rebote ofensivo de Tyson Chandler, pero con un juego en general bastante mejorable en ambos lados de la pista. Hasta el +18 lograron marcharse los de Minnesota, pero los Suns pudieron recortar mínimamente y el período finalizó con un +14, 69-83.
Los Suns tenían una oportunidad, ya que la diferencia no era ni mucho menos insalvable; pero su defensa no había existido en los 36 minutos previos, y tampoco apareció en estos últimos 12. Mediado el cuarto la diferencia superó incluso la veintena, y ya solo quedaban esos «minutos de la basura» para dar minutos al fondo del banquillo y determinar cuál sería el resultado final. A 2 minutos y medio para que sonara la bocina del final del partido la distancia llegó a la treintena, y aunque incluso se amplió un poco más, el resultado final fue de 87-117.
Resumen estadístico:
- Phoenix Suns: Brandon Knight (20 puntos) y Markieff Morris (17 puntos).
- Minnesota Timberwolves: Andrew Wiggins (18 puntos); Ricky Rubio (18 puntos); Karl-Anthony Towns (14 puntos y 8 rebotes) y Gorgui Dieng (15 puntos y 6 rebotes).