Los Jazz no eligen hasta la elección número 24 de la primera ronda del próximo draft, pero eso no les ha impedido el invitar al base Donovan Mitchell a entrenar con ellos recientemente. El ex de Louisville es otro de los jugadores que aprovechó el Combine para exhibir físico y subir puestos en el ranking, y el consenso es que estará como poco entre los 15 primeros elegidos el 22 de junio.
La ironía de la offseason NBA obliga a las franquicias a tomar decisiones en el draft sin saber seguro cómo encajarán esas piezas en sus plantillas, ya que el mercado de agentes libres no se abre hasta ocho días después y conjuntos como los Jazz podrían sufrir cambios muy profundos si tan solo uno de sus jugadores decide marcharse.
Ahora mismo los Jazz cuentan no sólo con un base titular para el presente – George Hill, que le costó a Utah su primera ronda del draft pasado -, también disponen del número cinco del draft de 2014, el australiano Dante Exum, que a pesar de llevar ya tres años en la NBA apenas cuenta con 21 años. A priori no necesitan un base, pero como hemos dicho, el mercado podría cambiar bruscamente la situación actual de los Jazz si Gordon Hayward decide irse después de ejercer su opción para convertirse en agente libre. Si el de Indiana se va es muy probable que Hill le siga, ya que el ex de Spurs y Pacers ya dijo que su continuidad estaría ligada a la de Hayward.
Sin embargo Mitchell es un jugador que podría encajar en los Jazz tanto si Hayward se queda como si no. Lejos de ser el prototípico base de antaño, el natural de Connecticut es un jugador con la envergadura suficiente como para defender escoltas e incluso aleros y que puede rotar sin crear desventajas para su propio equipo. A pesar de sólo medir 1,91m., Mitchell tiene una envergadura de 2,08m. y en Louisville se especializó en ser un defensor total – 2,1 robos por partido en 2016/17 -. Él mismo sabe que su valor reside en esa versatilidad:
«Creo que toda empieza en defensa. Creo que puedo jugar y defender ambas posiciones – base y escolta -. Al final del día quiero ser lo suficientemente rápido como para defender a gente como Russell Westbrook y lo suficientemente grande como para cubrir gente como Klay Thompson. Pienso que puedo hacer ambas».
No es que el exterior de 21 años fuese un cero a la izquierda en Louisville, en realidad Mitchell promedió en su segundo y último año en la universidad 15,6 puntos, 4,9 rebotes y 2,7 asistencias, pero en ese aspecto le queda mucho por crecer y tendrá que mejorar aspectos de su juego como la visión, el pase y el tiro exterior si quiere producir desde el primer momento en los profesionales. Su defensa sin embargo está lista para impactar el juego de su equipo ya mismo, y un equipo como los Jazz que quiere llegar a lo más alto va a necesitar jugadores capaces de defender múltiples posiciones si quieren pasar por encima de obstáculos como Spurs o Warriors en su camino a unas posibles finales.
Un porcentaje por encima del 80% en sus tiros libres denota que hay posibilidades de seguir mejorando como tirador exterior, y aunque nunca consiga manejar un partido como alguien como Hill haría, el hecho de tener experiencia como base le vendrá bien para crear tiros para él y sus compañeros en una hipotética segunda unidad o como playmaker secundario. Su físico es imponente aún contando con su corta estatura, pero Avery Bradley con su 1,92m. o Tony Allen con su 1,95m. también han triunfado a pesar de ello. Mitchell es mejor ofensivamente que ambos cuando llegaron a la NBA, y en el caso de Allen todavía mismo, y tiene potencial como penetrador al aro y en contraataque.
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Es muy posible que Mitchell no llegue hasta el número 24 en el draft, pero los Jazz han hecho bien echándole un vistazo más de cerca por las posibilidades infinitas que un versátil exterior como él puede dar en la NBA. Tanto si Utah consigue mantener a Hayward y Hill como si no, Mitchell es uno más en la revolución del baloncesto moderno que premia la envergadura y la velocidad para cubrir grandes distancias y espacios en defensa, rotando en multitud de ocasiones para negar el pick n’ roll al rival y sin perder un ápice en ataque.
Utah sólo tiene que esperar que muchos otros equipos no le seleccionen o realizar un traspaso para subir puestos en el draft, pero de momento Mitchell parece que interesa en Salt Lake City.
