Resumen SB: Stephen Curry vuelve y los Warriors destrozan a Houston

Golden State derrotó a Houston con 41 puntos de diferencia.

Nuevo duelo entre los dos mejores equipos de la NBA. La serie se desplazaba a Oakland para que alguno de los dos equipos pusiera fin a la igualada en el resultado global de la serie. Para comenzar el partido, los Rockets arrastraron el gran momento del segundo partido poniéndose por delante con una ligera ventaja de cuatro puntos hasta que Steve Kerr decidiera pedir un tiempo muerto para reorganizar el partido. A partir de ese momento, Stephen Curry, quien no está atravesando una buena racha con su tiro, intentó ser algo más agresivo y metió un triple aunque falló otros cinco. Durant y Thompson estaban desaparecidos, aunque la defensa de los Warriors estaba presente y gracias a las transiciones y los puntos al contraataque, Golden State llegaba a los cinco puntos de ventaja. Eric Gordon volvió a ser importante desde el banquillo tanto con el tiro exterior como con penetraciones. La entrada de Kevon Looney fue muy positiva para los Warriors mientras que Durant e Iguodala se iban calentando. Nick Young también proporcionó acierto exterior para dejar el resultado en un 22-31 al final del primer cuarto a favor de los locales.

Durante el segundo cuarto se mantuvieron las imprecisiones por parte de ambos equipos. Stephen Curry seguía sin encontrarse a sí mismo y Kevin Durant no contaba con todos los balones posibles para poner en funcionamiento el ataque. Por el otro lado, contábamos con la peor versión de Houston Rockets con un James Harden que no terminaba de explotar y Chris Paul totalmente desaparecido del partido con muchos fallos en los tiros de campo. Ni siquiera los tiros libres eran favorables para ellos. Un partido que dejaba mucho que desear por parte de ambos aunque todo cambiaría en pocos minutos. Andre Iguodala siguió siendo el más disciplinado de Golden State y uno de los jugadores más agresivos mientras que Klay Thompson anotaba lo que podía desde la media distancia y sin abusar en exceso del tiro de tres puntos. A base de defensa y por las pérdidas de balón de Houston, los Warriors se marcharon con una ventaja de 11 puntos al descanso, 43-54.

Tras el descanso, los Warriors volvieron a ser los Warriors. Comenzaron bien el cuarto con un gran Kevin Durant que no fallaba sus tiros, pero lo mejor estaba por llegar. Houston Rockets con Capela y Chris Paul reaccionaron con un parcial de 10-2 para volver a meterse en el partido hasta que Stephen Curry despertó y empezó a meter sus triples, lo que le llevó a aumentar su nivel de confianza y tirar mucho más. La ventaja de los Warriors llegó a estar en 28 puntos y los Rockets estaban desesperados. No veían solución a una explosión de Golden State en casa, algo que nunca suele ser favorable para sus rivales. Mantuvieron un nivel de dominación sobre los Rockets que no pudieron manejar y el resultado al finalizar el tercer cuarto fue de 67-88 a favor de Golden State.

En el último cuarto, los Warriors siguieron dominando y dieron entrada a sus jugadores de la segunda unidad para que terminaran el trabajo. En un par de minutos, Quinn Cook tiró la puerta abajo con 11 puntos pidiendo más minutos a Steve Kerr mientras que Joe Johnson hizo lo mismo del lado de Houston. Los Warriors sumaron su victoria en Playoffs número 16 de manera consecutiva en el Oracle Arena, superando el récord anterior de los Chicago Bulls de Michael Jordan. El resultado global de la serie es de 2-1 a favor de los chicos de Steve Kerr que buscarán no perder la ventaja de campo en el cuarto partido y encarrilar la serie.