La buena defensa de Atlanta tumba a unos Blazers peleones

Atlanta Hawks 104 - 98 Portland Trail Blazers

Fuente: Keith Allison (CC)
Fuente: Keith Allison (CC)

En el baloncesto, no todo consiste en que tu equipo disponga de jugadores capaces de anotar 35 puntos por partido todas las noches. Una buena preparación de los encuentros por parte del técnico es esencial a la hora de llevarse victorias, y los Hawks tienen un filón en el banquillo con su técnico Mike Budenholzer. Atlanta visitaba ayer la cancha de los Blazers, y la clave, más allá del buen partido de la dupla formada por Paul Millsap y Kent Bazemore (23 puntos por barba), fue la defensa planteada por el mejor técnico de la NBA en la pasada temporada.

Los Hawks conocían perfectamente lo que tenían que hacer para tumbar a los de Portland, que si por algo se están caracterizando en lo que llevamos de campaña es por un gran acierto desde la larga distancia, y formaron una muy buena defensa perimetral para maniatar a los Lillard (18 puntos y 1-6 en triples) y compañía. Solo C.J. McCollum, que venía de una exhibición en Washington DC, pudo poner en problemas a los Hawks, finalizando el partido con 28 puntos, pero eso sí, un 2-7 en lanzamientos de tres. Portland promediaba un genial 40% de acierto desde la larga distancia, pero en el partido de ayer tuvo que conformarse con un pobre 29% (9-31).

Atlanta comenzó el encuentro sin ninguna prisa; sin cometer errores que permitieran a los Blazers encontrar cualquier mínimo resquicio para perforar su aro. Millsap y Bazemore mostraron que iban a tener mucho que decir desde los primeros minutos. El ala-pívot acabó el primer cuarto con 8 puntos, mientras que el ex Warrior y Laker aportaba cuatro tantos y otras cuatro asistencias. Portland aguantó el ritmo menos de 10 minutos, pero, de nuevo cabe destacar la defensa de los visitantes, no anotaron en los últimos 3:30 minutos del periodo y los Hawks se marcharon con un 29-18 a favor.

El inicio de segundo cuarto sí fue un cúmulo de errores para ambos conjuntos, que no encontraban la manera de mover el marcador. Para fortuna de los aficionados, emergió la figura de McCollum para rescatar un encuentro abocado al bostezo. El escolta de los Blazers comenzó a ver aro y acercó a los suyos en el luminoso gracias al pobre parcial de los Hawks, que solo anotaron 14 puntos en el cuarto. 43-38 para Atlanta y todos a vestuarios.

Los minutos de descanso no afectaron a la muñeca de McCollum, que volvió a la pista como un tiro y levantó al público del Moda Center, que empezaba a creer en la victoria. Los Hawks, que veían como el partido podía escaparse, volvieron a encontrar el ritmo en ataque, sobretodo a base de triples. Jeff Teague y Al Horford lideraban la ofensiva visitante, y Bazemore castigaba a los de Terry Stotts en los dos lados de la cancha. Una canasta de McCollum en los últimos segundos ponía un 74-72 todavía para Atlanta a falta del cuarto decisivo.

Los primeros minutos tuvieron unos protagonistas claros: Millsap y Lillard. El de los Hawks volvía a aparecer desde el primer periodo, mientras que el base de los locales daba muestras de vida por primera vez en el encuentro. ‘Dame’ anotó seis puntos consecutivos para poner a los suyos por delante, y un triple de un fallón Meyers Leonard, que acabó con un doble-doble de 10 puntos y 10 asistencias, ponía a Portland en un +5 que hacía soñar a los espectadores. La batalla estaba en todo lo alto en los últimos 200 segundos, y fue en ese momento cuando, una vez más, Millsap y Bazemore salieron al rescate de Atlanta para cerrar la victoria. Los Blazers, en los que ya solo anotaba McCollum, quedaron inoperantes, y aunque pelearon hasta el final, acabaron cayendo por 104-98.

Con este triunfo, los Atlanta Hawks se colocan con un récord de 26-17 que les mantiene en las primeras posiciones del Este, mientras que los Portland Trail Blazers siguen con su campaña irregular y firman un 19-26, que sorprendentemente todavía mira a los puestos de Playoffs.