¿Es el momento de iniciar la era post-Anthony?

existe la posibilidad de construir alrededor de Porzingis

Carmelon Anthony
Keith Allison (CC)

Hace ya muchos años que Carmelo Anthony llegó a la ciudad que nunca duerme; llegó como una gran estrella, como el salvador de uno de los equipos más históricos de la liga pero, tras varias temporadas, los Knicks solo han tenido una buena temporada —la 2012/13 siendo segundos de conferencia, aunque cayendo en segunda ronda de PO— y otras muchas más que malas. Anthony ha sido la estrella de un equipo que no tenía más grandes jugadores… hasta ahora. Kristaps Porzingis fue seleccionado por los Knicks en este pasado Draft después de encandilar a Phil Jackson y de no convencer a unos fans que preferían a jugadores con más renombre como Mudiay o Winslow. Pero a base de buenos partidos, el letón ha convertido las críticas en aplausos —y en compra de camisetas— y ya lo ven como la nueva estrella knickerbocker; por eso la duda está en el aire… ¿Debe Porzingis ser la estrella y traspasar a Carmelo Anthony?

La desconfianza en Carmelo Anthony tiene buenos fundamentos: Es uno de los jugadores que más cobra de toda la liga y su rendimiento no está acorde a los millones que gana; esta temporada está teniendo un buen juego colectivo-defensivo, pero está tirando con algunos de los peores porcentajes de su extensa carrera; además, sus 31 años y su largo contrato no hacen presagiar una mejora en su juego para lo que queda de su carrera. También es importante tener en cuenta el gran nombre (y con razón) que tiene, y su «hype» lo convierten en una pieza más que atractiva de cara a un traspaso; más de una franquicia darían muchas piezas jugosas para conseguir que el alero vistiera su camiseta. Eso sí, Anthony tiene una cláusula anti-traspaso que le otorga la posibilidad de vetar cualquier movimiento por parte de Jackson en el cual su nombre esté involucrado, lo que dificulta y mucho cualquier traspaso, pues tiene que contentar al jugador. Otro tema que frenaría a la franquicia a traspasar a Anthony sería la necesidad de tener entre sus filas a una estrella veterana que sirviera como mentor de Porzingis, papel que está asumiendo a la perfección Melo.

Si analizamos la situación de Kristaps Porzingis, el letón solo lleva unos meses en la mejor liga del mundo y sería muy arriesgado ver al pívot, ahora mismo, como un jugador sobre el que construir una franquicia y no un segundo/tercera espada que progrese y termine triunfando a su debido tiempo, es muy pronto y todavía puede ser el nuevo Nowitzki o el nuevo Bargniani; y no es lo mismo construir desde el alemán que desde el italiano, ¿verdad?

Sin duda alguna, no es una fácil situación para los jefes de los New York Knicks. La pareja Anthony-Porzingis ahora mismo no es suficiente como para hacer pensar a los fans neoyorquinos que vayan a ganar algún anillo en un periodo corto de tiempo, y la sensación es que se han encontrado demasiado tarde; uno subirá pero el otro bajará y el nivel general será más o menos el mismo; pero son pocos el número de traspasos que pueden hacer mejorar al equipo en un futuro a corto plazo —otra cosa sería cambiar totalmente de rumbo y mirar más al futuro consiguiendo jugadores jóvenes que no han explotado completamente y o rondas teorícamente buenas para futuros Drafts— como pocos son los jugadores que podrían estar «en el mercado» que mejorasen el rendimiento (aunque algo flojo para lo que podría hacer) del actual «7» knickerbocker. Las firmas de jugadores como Robin López o Arron Afflalo van en la dirección de formar un equipo ganador pronto, por lo que «la estrategia de futuro» rompería completamente con todo el trabajo que se ha estado haciendo en los últimos meses.

Pero… ¿Cómo están los Knicks? Hay que decir que estas necesidades por parte de muchas voces de un cambio tan grande no tiene una gran sincronización con el rendimiento del equipo. El récord de 14 victorias y 14 derrotas es, más o menos, lo esperado para este equipo, un equipo puente que mejore (con diferencia pues el reto era fácil) la actuación de la pasada temporada. Se puede ver a estos Knicks como un activo en una bolsa de valores que, después de desplomarse, realiza varias acciones para recuperar la confianza de los inversores (en este caso los jugadores) para luego volver a convertirse en uno de los activos más atractivos. En este juego de confianzas «económicas» también entran nuestros dos protagonistas: ¿es más atractivo Melo o Porzingis de cara al mercado de agencia libre?, ¿es necesario tener a ambos para atraer a buenos jugadores o con el letón solo y un récord como el actual basta?, ¿cuánto problema para firmar estrellas es el contrato de Anthony? Parece que es necesario un máster en economía para aclarar tantas preguntas. Es cierto, volviendo a la temporada actual, que han tenido derrotas que las podían haber solucionado; pero que estén a varios partidos de los PlayOffs (el máximo objetivo para esta campaña) no se debe a un mal juego propio, sino a una explosión de nivel en la Conferencia Este que hace encarecer mucho estar en la postemporada, y ante una sorpresa de estas magnitudes poco se puede hacer.

El debate está en las calles: ¿quién es el futuro de los Knicks: Melo, Kristaps o los dos? Y, en caso de que la respuesta sea solo el letón… ¿Cuándo debe comenzar su época y qué importancia tendría Anthony en ella?