Anthony Bennett, ¿acierto o fracaso?

La plantilla de los Toronto Raptors parecía prácticamente cerrada a 23 de Septiembre de 2015. Incluso en esta propia redacción, incluso mis propios artículos, os dejábamos las impresiones de que el equilibro, disparidad y calidad del equipo formado por aquel entonces por 14 jugadores era total. Sin embargo, resonaban por los alrededores de Toronto unos rumores en los que se comentaba la posible llegada de uno de los hijos pródigos más deseados, quizás el protagonista del culebrón del verano y sin duda el mejor reboteador en ataque de toda la NBA, el PF Tristan Thompson. Los Raptors ya se habían hecho con su amigo, compañero de selección y ganador de un anillo Cory Joseph y querían más canadienses en los Raptors.

¿Y qué ocurrió amigos míos? Que llegó un canadiense, sí, un alapívot, también, y por qué no decirlo, un buen reboteador en ataque.

Hasta aquí podríamos decir que llegan las similitudes entre el producto que nos vendían (Tristan Thompson) y el que finalmente compramos, Anthony Bennett. Tras ser cortado por los Minnesota Timberwolves, aterrizaba en Toronto el flamante número 1 del Draft de, lean bien amigos, ¡2013! Su llegada parecía tener una explicación más comercial/moral que deportiva, puesto que los aficionados Raptors estaban sedientos de victorias y de jugadores canadienses.

Por ello, Anthony Bennett jugaría en su tercer equipo en tres temporadas en la NBA, firmando con los Raptors un contrato por el mínimo de veterano (sí, veterano con 22 años). De esta manera los Toronto Raptors copaban su franquicia con 15 jugadores con contrato garantizado antes del inicio de temporada, el máximo permitido por la liga. Sus números hasta ahora han sido un poco decepcionantes. Si bien es cieto que no se esperaba nada especial del exUNVL, su juego en Toronto le ha permitido jugar 15 partidos, para un total de 74 minutos, consiguiendo 23 puntos, 21 rebotes y 4 robos. Llegaba al equipo como presumible tercer ala-pívot en la rotación de Dwane Casey, por detrás de Patrick Patterson (teórico titular) y el veterano Luis Scola. Pues bien, lo que finalmente ha ocurrido es al contrario. El argentino “Luifa” se ha asentado como titular, generando unos geniales arranques de partido y desarrollando un fiable tiro de tres. Asimismo, Patterson sigue siendo el suplente con más importancia en la rotación, y es el tercer jugador con más minutos en los Q4, por delante de gente como Valanciunas, DeRozan o Ross. Esto nos deja a un Anthony Bennett marginal en la rotación y con pocas perspectivas de mejoría. Con la lesión de larga duración de DeMarre Carroll (alero titular), la situación no cambió lo más mínimo. El alero James Johnson pasó a ocupar el puesto del fichaje estrella del verano, mientras que Norman Powell entró poco a poco en la rotación como escolta-alero suplente, pese a ser un “rookie” de segunda ronda del Draft. ¿Qué debió pasarle a Bennett en ese momento por la cabeza? No lo sabemos, pero seguro que como mínimo se sintió despreciado e infravalorado.

Sigamos analizando el transcurso cronológico de este año. El alero James Johnson se lesionaba el pasado 30 de Enero ante los Pistons en Detroit, con lo que dejaba vacante la posición de alero titular. Anthony Bennett, quien ya había jugado en dicha posición tanto en su años de NCAA con su pasada campaña en los Minnesota Timberwolves parecía partir con ventaja de cara a afrontar la titularidad. Sin embargo, tuvo que volver a presenciar como el joven “Norm” contaba con el apoyo de Casey y se hacía con la titularidad, desplazando a DeMar DeRozan al puesto de alero. En resumidas cuentas, Bennett tan solo ha promediado 4.9 minutos por encuentro, firmando 1.5 puntos, 1.4 rebotes y 0.3 robos, números muy pobres para una persona que fue seleccionada en la noche del Draft por encima de nombres como Victor Oladipo, Nerlens Noel, C. J McCollum, Michael Carter-Williams, Rudy Gobert, Giannis Antetokounmpo, o Kentavious Caldwell-Pope. Puede ostentar el título de “peor número 1 de la historia de la NBA” y parece que sus días en la liga podrían estar llegando a su fin.

El aún joven jugador canadiense ya ha disputado 6 encuentros en la Liga de Desarrollo con la camiseta de los Raptors 905. Con la franquicia afiliada ha promediado 9.2 puntos, 3.2 rebotes y 1.0 robos, cifras lejanas a las que cabrían esperar hablando de un jugador que dominó la NCAA en sus años en Las Vegas. Por ello, surge una pregunta, ¿fue un acierto su fichaje o por el contrario un estrepitoso fracaso? Los Raptors podrían haberse quedado en 14 fichas, con Caboclo, Wright, Powell y Nogueira como jóvenes promesas y con 10 jugadores con capacidad para rendir desde ya en la NBA. De esta manera, los canadienses podrían. Caben destacar, a grandes rasgos, nombres como Ronald Roberts JR, Axel Toupane, Sim Bhullar o Scott Suggs, figuras que están jugando al mejor nivel con la franquicia novata canadiense.

Por tanto, dejamos nuevamente la pregunta en el aire, ¿fue un fracaso firmar al canadiense Anthony Bennett? Esperamos expectantes sus opiniones al respecto.