Los 10 mejores jugadores en la historia de Atlanta Hawks
Los diez nombres que marcaron una época en Atlanta
10 – Joe Johnson
(2005-2007) – 20’9 puntos – 4’2 rebotes – 5’2 asistencias
Comenzamos la lista con un conocido de la época actual, Joe Johnson, en la franquicia hasta 2012. Johnson estuvo en la franquicia 7 temporadas, desde que llegó en 2005, y le valieron para colocarse en el puesto número 6 de máximos anotadores en la historia de los Hawks. Con Johnson en el equipo se consiguió alcanzar los Playoffs varios años consecutivos, aunque nunca llegando más allá de segunda ronda, con un equipo que competía pero parecía estancado en el mismo punto año tras año.
9 – Spud Webb
(1985-1991) – 7’7 puntos – 1’8 rebotes – 4’5 asistencias
Un clásico en Atlanta Hawks. El ganador del concurso de mates de la NBA en 1986 llegó a los Hawks en esa misma temporada (Rookie), y llamó la atención de todos por las increíbles cosas que era capaz de hacer a pesar de medir no más de 1’70 m. Tampoco es un jugador que consiguió el éxito colectivo con los Hawks, ya que a las órdenes de Mike Fratello aquellos Hawks no consiguieron pasar nunca la segunda ronda.
8 – Lou Hudson
(1966-1977) – 22 puntos – 4’9 rebotes – 2’2 asistencias
El escolta/alero nacido en Carolina del Norte disputó casi toda su carrera en Atlanta Hawks. Un total de 11 temporadas, liderando a los Hawks en la lucha de los Playoffs en el Este, aunque nunca consiguiendo llevar ningún campeonato a Atlanta. Hudson era un anotador voraz, llegando a promediar 27 puntos en una temporada y siendo All-Star en hasta seis ocasiones. Sin duda el líder ofensivo de la franquicia en esa época.
7 – Cliff Hagan
(1956-1966) – 18 puntos – 6’9 rebotes – 3 asistencias
Siempre a la sombra de Bob Pettit, Hagan es también uno de los hombres más importantes en la historia de la franquicia.
Sus números e hitos hablan por si solos: 5 veces All-Star, 4º anotador y 9º reboteador en la historia de los Hawks, además de pieza fundamental e imprescindible en el único título de la historia, el de 1958. Hace ya casi 60 años que Cliff Hagan debutó con los St Louis Hawks, y aquí valoramos su contribución a la franquicia con este séptimo lugar.
6 – Al Horford
(2007-2016) – 14’3 puntos – 8’9 rebotes – 2’7 asistencias
Ya fuera de la franquicia, Al Horford es indiscutiblemente pieza a destacar en Atlanta Hawks. Jugador esencial de los únicos Hawks en llegar a 60 victorias (2014-15). Además, es un cuatro veces All-Star con Atlanta, donde ha jugado un total de nueve temporadas completas. Su gran talento, trabajo en equipo y contribución al crecimiento de los Hawks desde su llegada le hacen ganarse este sexto lugar en la lista.
5 – Moses Malone
(1988-1991) 16’5 puntos – 10 rebotes – 1’3 asistencias
Estamos ante uno de los mejores reboteadores de la historia del baloncesto, Llegó a los Hawks ya con 33 años, y solo se quedó tres temporadas, pero su trabajo e impacto en la franquicia fue inmediato. Además fue All-Star en la primera temporada con los Hawks, dónde promedio un 20-12 a pesar de ser ya un jugador veterano. Su dupla con Dominique no dominó en absoluto el Este, pero el paso de Moses por la capital de Georgia quedará ya para el recuerdo.
4 – Pete Maravich
(1970-1974) 24’3 puntos – 4’2 rebotes – 5’6 asistencias
El legendario ‘Pistol Pete’ pasó sus primeros años en la liga en los Hawks, dónde formó junto a Lou Hudson una de las duplas anotadoras más salvajes de los 70. De media, promediaban entre los dos fácilmente 52 / 53 puntos, pero no consiguieron el éxito colectivo, al no llegar a pasar nunca de semifinales del Este. Maravich estuvo solo cuatro temporadas en Atlanta, con unos promedios increíbles que le valieron para ser All-Star en dos ocasiones.
3 – Dikembe Mutombo
(1996-2000) – 11’9 puntos – 12’6 rebotes – 3’2 tapones
Un muro defensivo como pocos en la historia de la NBA. Dikembe es leyenda indiscutible de los Hawks. Un icono de la ciudad dónde consiguió ser All-Star en cuatro ocasiones, dos veces mejor defensor de la liga, dos temporadas máximo reboteador y tres temporadas máximo taponador. Mutombo demostró, y de que manera, que se puede ser decisivo como el que más sin necesidad de meter 20 puntos por noche.
2 – Bob Pettit
(1954-1965) 26’4 puntos – 16’2 rebotes – 3 asistencias
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Toda su carrera deportiva en la franquicia, es imposible obviar la carrera de esta leyenda con mayúsculas. Bob Pettit fue un icono de la liga a finales de los 50, y consiguió el hito de conseguir para los Hawks el único título de su historia en el 58, por aquel entonces llamados St. Louis Hawks. De lejos el máximo reboteador de la franquicia y un imprescindible en el All-Star, dónde es de los pocos jugadores que puede presumir de en todas sus temporadas en la liga haber sido seleccionado para el juego de las estrellas (11 de 11).
1 – Dominique Wilkins
(1982-1994) 26’4 puntos – 6’9 rebotes – 2’6 asistencias
Desde los 90, la cara de la franquicia. Piensas en Atlanta Hawks y piensas en Dominique Wilkins. 12 temporadas vistiendo la camiseta con unos promedios brutales al alcance de muy pocos. La última gran estrella de la franquicia, con la que se quedó a las puertas del MVP en el 86, arrebatado en el último suspiro por Larry Bird. Si no hubiese coincidido con los tiempos de Michael Jordan, Larry Bird y Magic Johnson probablemente estaríamos hablando de un jugador con varios premios MVP. Nunca llegó lejos en lo colectivo, no pudiendo pasar de semifinales del Este en ningún año, pero su talento, su físico privilegiado y su lucha por llevar a los Hawks a lo más alto posible en la liga le convierten en el jugador más influyente en la historia de la franquicia.
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