Tras la derrota ante los Wizards, 82-106, Detroit se pone con un balance de 14-18. Lo peor, una vez más, es la triste imagen ofrecida en el partido, tal y como pasó el viernes frente a Orlando. La irregularidad del equipo sigue siendo uno de los mayores problemas a los que debe hacer frente Cheeks, pero, por si no fuera suficiente, ahora aparece un nuevo motivo de preocupación; la situación de Smith.
Smith siempre es señalado como uno de los culpables de la marcha del equipo ya que no está cumpliendo con las expectativas. Su rendimiento está muy por debajo de lo esperado y Cheeks parece que no está contento. Ayer, en Washington, decidió sentarle en el banquillo durante toda la segunda parte. Era la tercera vez que Smith recibía un castigo por parte de Cheeks; dos sentándole en el banquillo y una sin jugar por faltar a un entrenamiento. Josh Smith no acaba de encontrar su lugar en el equipo y mucho puede ser debido a la posición de 3 que ocupa cuando coincide en la cancha con Drummond y Monroe.
Smith :» Es un honor para mi jugar, ¿sabes lo que digo? Así que cuando alguien pone en duda el hecho de que no quiera jugar me lo tomo como una verdadera ofensa»
Cheeks había puesto en duda su entrega durante el partido cosa que Smith niega. Tendremos que esperar a ver que pasa el lunes frente a los Wizards pero lo que queda claro es que ya tenemos la primera polémica de la temporada.
