Los Boston Celtics siguen buscando su defensa

Preocupante pero no alarmante inicio defensivo

DANNY BOLLINGER (CC)
La baja de Jae Crowder afecta enormemente al rendimiento defensivos de los Boston Celtics/ Foto: DANNY BOLLINGER (CC)

Los Boston Celtics han comenzado la temporada compartiendo escenario con un grupo de equipos con los que, para nada, esperaban verse reflejados. Si os afirmo en julio que el equipo estaría peleando con los Kings, Knicks y Rockets por no ser la peor defensa de la NBA, más de uno habría atentado contra mi honor en las redes sociales. El hecho es que solo 7 décimas nos separan del peor Defensive Rating de la liga (estadística que mide los puntos encajados por cada 100 posesiones), cuando, tan solo unos meses atrás, nos quedamos a las puertas del podio de las mejores en este apartado. ¿Qué está pasando?

  • Respuesta simple: Los rivales están viendo el aro más grande que la boca de Charles Barkley.
  • Respuesta compleja: La maldita «suerte irlandesa«, junto a circunstancias internas y externas, están provocando que el equipo esté defendiendo a la altura del proyecto «4 en defensa un palomero» de los Kings en 2014.

Si bien esto es algo digno de preocupación, entiendo que no es un problema que deba activar las alarmas. La defensa de los Celtics volverá, en cuánto un par de circunstancias cambien:

La famosa «profundidad de plantilla» cae por su propio peso

El pequeño leprechaun, al que llamaremos «Pi**no» de ahora en adelante, que acompaña al equipo desde hace demasiado tiempo, se ha llevado ya a tres de los mejores jugadores de la plantilla, también tres de los cuatro mejores defensores, con lesiones de cierta gravedad.

En un sistema tan coral como el de los Boston Celtics perder piezas tan importantes tiene que afectar al juego en mayor o menor medida, y el hecho de no poder contar con Crowder, Horford y Smart regularmente en este inicio de temporada, hace que el aspecto defensivo vea mermado su rendimiento. Es algo normal.

Los recambios para los dos titulares, Tyler Zeller y Jaylen Brown, pueden encajar en una definición amplia de «plantilla profunda«, pero ninguno destaca por su habilidad defensiva. El center está teniendo unos problemas terribles a la hora de contener las penetraciones. El rookie, con todo el potencial que se le quiera otorgar, que lo tiene, comete errores aceptables y normales en un jugador con 6 partidos en la NBA en sus espaldas.

El resto de la plantilla, salvo Avery Bradley, Amir Johnson y Marcus Smart, no tienen la defensa como un activo a sumar. Gerald Green, Terry Rozier y James Young no son capaces de llegar al nivel defensivo exigido. Por su parte, Jonas Jerebko y Jordan Mickey, están pasando por un bache de rendimiento, muy preocupante en el caso del sueco.

La rotación está viviendo a base de parches, que la defensa sufra en este contexto es algo que se podría definir hasta como lógico. Tenemos jugadores válidos en el banquillo, pero la pérdida de dos puntales no puede compensarse con ninguno de ellos. La profundidad cae por su propio peso, ya que no tenemos el suficiente talento.

La situación debería mejorar cuando podamos contar con todos los jugadores. El equipo ha progresado individualmente en cuanto a defensa se refiere, por lo que sería conveniente tener paciencia y esperar a que todo vuelva a la normalidad.

No estamos teniendo el D.I.A.

Allá por enero de este año, tras las derrotas contra Nets y Lakers, un servidor acuñó un término a aplicar a un equipo falto de agresividad.

Defensa

Intensidad

Actitud

Cuando los Celtics no tenían el D.I.A. eran uno de los peores equipos de la NBA, porque toda su falta de talento era compensada con una extrema agresividad defensiva.

Tras 10 meses desde su nacimiento, el D.I.A. sigue siendo aplicable a unos Boston Celtics que, si bien han aumentado en talento, han perdido en intensidad. Los rivales están siendo más agresivos, y físicos que ellos.

«Viendo el vídeo contra Denver pienso que esto puede ser malo para nosotros», dijo StevensY la razón por la que pienso esto…la manera más bonita en la que puedo decir esto es que pienso que jugamos como un equipo delicado, y los Nuggets jugaron de manera física«.

A la falta de jugadores demasiado importantes para el sistema, hay que sumarle una falta general de actitud. Es obvio, e incluso aceptable, que el equipo sufra atrás cuando este tipo de suplentes juega minutos de titulares. Se puede llegar a entender que jugadores con pocos fundamentos defensivos sufran en el posicionamiento, cometan fallos y permitan más canastas. Lo que no se puede aceptar, y menos en los Celtics, es que los jugadores no brinden cada noche todas sus energías.

 «Creo que la defensa es una de esas cosas que simplemente tienes que hacer», dijo Stevens. «No se trata de hablar de ello. No se trata de anticipar lo buenos que podremos ser. Es un compromiso diario, una obligación».

Hay que tener en cuenta que jugadores carentes de defensa van a tener muchos problemas siendo intensos y físicos en tareas a las que nunca han dedicado mucha atención.

«No sé si ser el mejor equipo defensivo es posible estadísticamente tras esta semana», decía Stevens. «Ni siquiera sé si lo puedes hacer en 76 partidos. Pero sí sé que podemos hacerlo mucho mejor. Pero todo empieza con no ceder y jugar físico».

Los Boston Celtics necesitan que todos sus jugadores, en especial los 5 titulares más Smart, estén sanos y al 100% para poder rendir como nos tienen acostumbrados. La plaga de lesiones hace que jugadores sin especiales aptitudes ni actitudes defensivas tengan que asumir una responsabilidad a la que no pueden hacer frente. En el momento en que todo vuelva a la normalidad, con las rotaciones establecidas y una vez que el núcleo central consiga el punto físico idóneo, la defensa volverá. Por ahora, solo queda confiar en el buen momento ofensivo, aunque puede que sea un sostén insostenible.