Adam Silver habla sobre la burbuja y las protestas de los jugadores

El comisionado de la NBA, Adam Silver, se enfrenta a unas semanas de puro nervio. Los equipos comenzarán a viajar a la burbuja de Orlando a partir de la semana que viene, dando comienzo al plan que han diseñado para la finalización de la temporada 2019-20, que tuvo que ser suspendida por la amenaza del coronavirus.

Algunas de las medidas implementadas han suscitado una gran polémica, por lo que el propio Silver ha querido aparecer públicamente para hablar sobre ellas. Lo hizo en el programa de la revista Time, 100 Talks con Sean Gregory, donde ha dado detalles sobre cómo manejaran estas cuestiones.

Una de ellas ha sido el libre acceso y salida de ciertos trabajadores a la burbuja de Disney World. Algunos de los jugadores se han mostrado muy preocupados por la posibilidad de que pueda colarse el virus a través de esta norma, y no ven justo que ciertas personas puedan volver a casa con sus familias mientras ellos deben permanecer confinados allí.

“Tenemos un acuerdo que podemos llamar de puerta trasera a la burbuja, donde se pueden considerar como diferentes niveles de protección. Los trabajadores que estén en contacto directo con los jugadores o cualquier otra persona cercana a los equipos van a tener que seguir un protocolo muy estricto para evitar contagios, así como guardar la distancia social”.

“Yo mismo, estaré entrando y saliendo de la burbuja para poder dirigir la liga de manera correcta. Creo que lo más seguro para ellos será si yo no permanezco todo el tiempo allí, ya que estaré más expuesto a un posible contagio”.

Otro de los temas polémicos de esta reanudación son las protestas raciales de los jugadores. Kyrie Irving y Avery Bradley lideraron una coalición que se negaba a participar en la reanudación de la temporada para no desviar el foco mediático de las protestas por la muerte de George Floyd y el movimiento “Black Lives Matter”. Los que sí viajan a Orlando, han visto esta fase final como una oportunidad perfecta para dar voz a sus protestas a escala mundial.

Se verá el mensaje de “Black Lives Matter” sobre el parqué de todas las canchas que se utilizarán para jugar los partidos, y están estudiando poner mensajes reivindicativos en las camisetas en lugar de sus apellidos. Sin embargo, el arrodillarse durante el himno es un gesto muy delicado que tendrán que solucionar, puesto que va en contra de las normas de la liga.

Este gesto lo inició Colin Kaepernick en 2014, y sus protestas raciales sobre el césped de los estadios de la NFL terminaron con su veto, donde ninguno de los equipos de la máxima competición deportiva norteamericana quiso ficharle al tener a parte de la población ideológicamente contraria en su contra.

“Tenemos una norma que se remonta a los años 80, impulsada por David Stern, que obliga a los jugadores a ponerse en fila durante el himno nacional. Pero entendemos el significado de la protesta y tendríamos que estudiar caso por caso. Creo que podremos lidiar bien con esta situación cuando se presente”.

Habían surgido rumores sobre la posibilidad de prohibir los himnos antes del partido para evitar estas imágenes, aunque finalmente, según ha confirmado Marc Stein del The New York Times, se escucharán tanto el himno de Estados Unidos como el de Canadá cuando jueguen los Toronto Raptors.