Un Ricky Rubio de récord en la victoria de los Timberwolves
Utah Jazz 80-94 Minnesota Timberwolves
Primer enfrentamiento entre los Utah Jazz y los Minnesota Timberwolves. Equipos que comparten división, pero también ambiciones y talento al mismo tiempo. Los Jazz, a pesar de la importante baja de Rudy Gobert, siguen aguantando la octava plaza que da acceso a la postemporada, pero los Wolves son uno de los varios equipos que persiguen a los de Salt Lake City por esa ansiada posición, por lo que de seguro será un partido disputado por lo que pueda estar en juego sobre el parqué del Target Center.
Comienzo fuerte de los Timberwolves, con Ricky asistiendo en todas las canastas de su equipo, pero los Jazz pronto reaccionaban para poner de nuevo la igualada. Parecía que el frío que azotaba Minneapolis se notaba dentro del pabellón también, sobre todo para Utah, que eran incapaces de anotar sus tiros de campo, aunque los Timberwolves no eran capaces de aprovecharlo del todo debido a varias pérdidas de balón. Así, consiguieron un 9-1 de parcial, dejando a los Jazz hasta prácticamente 6 minutos sin anotar un tiro, hasta que Chris Johnson consiguió clavar un triple. Mal cuarto en cuanto anotación, que queda demostrado en el 13-19 a final de cuarto, con un 21% de acierto en tiros de los Jazz por un 40% de los Wolves.
El desacierto continuaba en el nuevo cuarto. La primera canasta llegó de la mano de Tyus Jones tras 3 minutos de juego. Los Jazz continuaban desacertados y, esta vez si, los Wolves castigaron estos errores, sobre todo Towns con un par de 2+1, llegando a conseguir una ventaja de 12 puntos. Esa diferencia estaba estabilizada en torno a los 10 puntos durante la mayor parte del cuarto. Los Jazz no eran capaces de anotar triples, dejando ese porcentaje en un escaso 15%. Pero, a pesar de ello, conseguían numerosos rebotes ofensivos, sobre todo Trevor Booker, llegando a recoger 8 y 13 en total. El cuarto terminaría con un triple de Lyles, que dejaría el 38-31 favorable a los Timberwolves. Primera parte con una anotación nula, con unos Jazz en el 27% en tiros de campo (además de 14 pérdidas) y unos Wolves en un 36%.
En el principio de la segunda parte la anotación se volvió más fluida, sobre todo para los Timberwolves, que conseguían aumentar más la diferencia en el marcador. Pero conforme pasaban los minutos, se volvía al ritmo de la primera parte, con las diferencias estancadas en los dobles dígitos, hasta que los Timberwolves, en un pequeño parcial, consiguieron llegar a su máxima de 15 puntos. Para finalizar el cuarto, los Jazz fueron capaces de reducir esa distancia hasta los 10, terminando con un 62-52.
En el último cuarto se veía a unos Jazz más metidos en el partido, gracias a un buen Trey Burke, pero Towns no permitía que la diferencia se redujese más de lo debido. A falta de 6 minutos, los Jazz estaban a solo 6, con un acierto en el tiro nunca visto en el partido para ambos equipos. El propio Burke era el único capaz de aguantar a los Jazz en el partido ante unos Timberwolves que querían sentenciar el partido cuanto antes. Finalmente, un par de buenas jugadas consecutivas de los locales terminaron por sentenciar un partido con victoria por 94-80.
Los hombres más destacados del partido fueron Karl-Anthony Towns con 25 puntos y 10 rebotes, Trey Burke con 23 puntos (todos en la segunda parte) y Ricky Rubio con 10 puntos y 17 asistencias, igualando la mejor marca de la franquicia en este apartado.